jueves, 26 de julio de 2007

Baloncesto callejero




L
a verdad es que servidor nunca fué muy buen jugador de baloncesto; siempre fuí más de fútbol, que es, sin duda, el deporte que mejor se me da. También hay otros que se me dan bastante bien, como el ciclismo o el rugby (si, durante poco tiempo pero jugué a rugby). Pero, a pesar de todo, uno también ha hecho sus pinitos jugando a baloncesto, y lo ha hecho jugando durante dos veranos seguidos, todos los dias, de 17:00 a 21:30 y a veces incluso hasta más tarde.

La cosa empezó de forma simple, "oye, ¿echamos unas canastas", "vale, vamos"; y allí que nos íbamos a las canastas de la Plaza del Inferniño de Ferrol, donde, naturalmente, iba más gente a jugar. Total, que al cabo de unos días, íbamos la misma gente a jugar y nos conocíamos todos. He de confesar que, con no dárseme el baloncesto todo lo bien que yo quisiera, todos los días estaba deseando que llegasen las 16:30 para ponerme los tenis y los pantalones deportivos y arrancar hacia el Inferniño a echar las partidas de todas las tardes, y es que, para que negarlo, lo pasaba de vicio... eso, y el deporte que hacíamos, que eran horas y horas todos los días bajo un sol de justicia de verano.

Pues, hoy, me apetecía recordar y dedicarle una entrada a esas tardes calurosas echadas en el Inferniño aprendiendo a jugar en equipo (aunque algunos, y no diré nombres, nunca lo aprenderán jeje).

¡Un saludo!

1 comentario:

Juanki dijo...

yo en el patio del cole only futbol, pero en la casita al tenis sip mi deporte favorito hasta que la cague por ponerme gafas, es lo que tiene crecer.